Endeudarse, ¿es bueno o malo? ¿Cuándo vale la pena? ¿Cuál es la mejor forma? ¿Cuándo supone un mayor riesgo?
En este artículo vamos hablar de endeudamiento y a responder preguntas que te pueden ayudar a tomar las mejores decisiones si vas a asumir un compromiso de pago.
¿Qué significa endeudarse? Endeudarse implica la obligación de devolver una cifra de dinero que se pide prestada. Es un compromiso y se establece previamente con un plazo de devolución, y con intereses que deberán pagarse por ese préstamo.
Así como supone siempre un acuerdo de pago a futuro, también implica la oportunidad de acceder y disponer de un monto de dinero del que no se dispondría otro modo en el momento. Por eso, endeudarte puede ser una oportunidad para crecer, invertir o solucionar un tema, pero puede convertirse en un problema si no se cumple con el compromiso asumido.
Hay una serie de puntos que podés considerar antes de asumir un compromiso de pago, para ayudarte a tomar una decisión que sea buena para tu economía personal. La clave está en planificar. Y en entender cuándo una deuda es buena y cuando es mala para tu economía.
Las deudas “malas” son las deudas que te generan más problemas financieros de los que resuelven, porque implican pagar más intereses, o porque se usan para invertir en algo que no resulta rentable. En algunos casos incluso puede llevarte a tomar una nueva deuda para saldar la anterior, y entrar en una espiral de la que es difícil salir.
En cambio, una “deuda buena” es la que te puede ayudar a mejorar tu situación económica, a crecer. Por ejemplo, comprar en cuotas sin interés un producto al que no podrías acceder de otra manera. O invertir o ampliar un negocio o emprendimiento que está creciendo. O cuando nos permite alcanzar objetivos importantes y que de otra manera no serían posibles, como construir una casa o comprar un auto.
Pero lo importante siempre es entender cuándo y cuánto hay que estimar para saldar esa deuda, para cancelar los pagos pendientes y proteger tus finanzas personales.
Para poder tomar la mejor decisión respecto a endeudarte, podés empezar pensando estos puntos:
Una forma de saber si vale la pena endeudarse es pensar para qué estarías asumiendo ese compromiso de pago. Podés pensar si es una deuda que te permitirá estar mejor, por ejemplo en relación a tu calidad de vida, a tu bienestar, tus ingresos o a tu educación.
Otra forma es considerar si vale destinar parte de tus ingresos durante X cantidad de tiempo para saldar esa deuda. Por ejemplo: pagar en cuotas una compra de consumo inmediato, como el supermercado, quizás no sea lo mejor porque cuando la termines de pagar probablemente ya no tengas nada de lo que compraste.
Tené en cuenta que el hecho de que un comercio ofrezca cuotas, o de que ofrezcan un préstamo en el banco, no significa que siempre te convenga. Es importante evaluar en cada caso si tiene sentido asumir ese compromiso a futuro. Te recomendamos leer acerca de cómo usar tu tarjeta de crédito de forma responsable.
Por otro lado, si estás usando cuotas frecuentemente, o si necesitás endeudarte para tu día a día, podés repensar tus gastos, ajustarlos, ordenar tus cuentas personales, o buscar la forma de aumentar tus ingresos.
Siempre debés pensar cuándo endeudarte. Lo importante es analizar si tendrás la solvencia económica para afrontar las cuotas mes a mes por un periodo de tiempo. Esa seguridad puede desprenderse de tener un ahorro previo que alcanza para prever el pago de varios meses, o tener estabilidad de ingresos mensuales.
La mejor forma de calcular tu capacidad de pago es armar un presupuesto personal, anotando ingresos mensuales y gastos fijos y variables. Así, vas a poder saber cuánto dinero podés destinar a pagar cuotas. También te permitirá analizar si hay algún gasto que podés reducir o ajustar, para aumentar tu capacidad de endeudamiento.
En resumen, es importante considerar y prever tu situación de ingresos en los próximos meses: ¿se viene algún gasto grande que impedirá que pagues tus mis cuotas? ¿Estás en una situación laboral estable? ¿Podés comprometerte a pagar de acá a 3, 6, 9 o 12 meses?
Es fundamental conocer el costo total que vas a pagar por la deuda que asumas. Este punto te permite evaluar verdaderamente la conveniencia de endeudarte, y cuánto dinero destinar por mes a saldar la deuda.
Tené en cuenta el monto, el valor de la cuota, los intereses y el costo financiero total, que incluye costos, gastos de adquisición, comisiones que puedan cobrarse y otros elementos que definen el monto total que deberás pagar. Quizás te interese nuestro artículo sobre qué mirar a la hora de sacar un préstamo.
Nuestra recomendación es que tengas toda la información de antemano, para que puedas elegir y tomar una decisión consciente, a sabiendas del compromiso que estás asumiendo.
Y que a medida que obtenés una línea de crédito, vayas controlando tu historial crediticio para chequear que todo esté en orden. Podés conocer tu perfil crediticio en nuestra plataforma gratuita en la que además, te enseñamos a entender cómo te observan las entidades financieras.
Endeudarse siempre es arriesgado, pero mientras lo hagas con información, de forma ordenada y siempre contemplando tu capacidad de pago no debería convertirse en un problema.
Última actualización: Noviembre 2023 | Por: FinDoctor Argentina